Cuando hicimos el reportaje de boda de Manolo y Cristina se respiraba amor y felicidad, una pareja que transmitía cariño en cada fotografía. Al saber que esperaban a su primer hijo me hizo mucha ilusión y cuando me contrataron para realizar la primera sesión de fotos para su bebé me hicieron muy feliz. Es bonito saber que aunque pasen los años siguen confiando en mí.
Jesús es un ángel, sus padres tiene suerte de tener un hijo como este, se portó como un campeón durante toda la sesión, no protestó con los cambios de ropa ni por el tiempo.
El pequeño miraba a la cámara y sus preciosos ojos me cautivaron desde el principio. Su sonrisa iluminaba cada foto y fue facilísimo realizar este trabajo.
Espero que disfruteis como yo con estas imágenes que desprenden dulzura y amor.