Qué familia más bonita he tenido la suerte de fotografiar, son un encanto y la pequeña es para comérsela. Ya los conocí cuando la chica era un bebé y me enamoró con su sonrisas y sus preciosos ojos, pero es que ahora más mayorcita es una personaje, jajjaa, es simpática y esta bellísima.
A los papis le han regalado este recuerdo tan especial, una sesión de fotos los tres juntos, bueno también con su perra, que es una más de la familia, y muy bien que se portó.
Estuvimos dando un paseo por el gran parque del Alamillo, en Sevilla, aprovechando la luz del sol tan chula que se cuela entre los árboles. Y entre risas, conversaciones y cosquillas de la peque fui captando estos momentos que tanto me gustan a mi, la complicidad y el amor que existe en esta familia tan maravillosa.
Aunque al padre no le gusta mucho hacerse fotos, se dejó fotografiar junto a su mujer y a su hija, y logré unas instantáneas emotivas y llenas de felicidad. Y ya la chica con su madre muero de amor, que imagen más bonita, llenas de expresividad, de ternura y cariño, la felicidad en estado puro.
Gracias por el ratito tan bueno que me habéis hecho pasar, y enhorabuena por la familia tan estupenda que habéis formado.
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