Tenía muchas ganas de conocer a la recién nacida Triana, y el resultado ha sido maravillosos. Una niña adorable, buena, bonita, encantadora y que ha llegado para colmar aún más de felicidad, si cabe, a esta bonita familia.

Triana se ha portado de lujo, y así es un lujo hacer sesiones de bebés, jajjaja. Al principio como estaba dormidita aprovechamos para hacerle muchas fotos cambiándole el atrezzo, así era un gusto poder ponerle todas las cositas que teníamos tanto su mamá como yo.

Cuando la muchacha se despertó solo quería comer, así que entre toma de pecho y toma íbamos captando más imágenes preciosas de esta pequeñita princesa.

Otro de los momentos más emotivos son las imágenes tomadas junto a su hermanito mayor, Ángel, que la sostenías en sus brazos protegiéndola y cuidándola como hará toda su vida. unas instantáneas mágicas que reflejan el amor de hermanos.

Y ya junto a sus padres capturé unas fotografías llenas de felicidad, amor y complicidad. Una maravillosa familia que habéis formado, muchas felicidades Enrique y Laura.